LOS CONDES DE PERALADA & MALLORCA
Los Rocabertí han sido uno de los linajes nobiliarios más importantes de Cataluña y Mallorca y, por tanto, de la Corona de Aragón. Esta estirpe que tiene su origen el s. ix con Dalmau de Rocabertí, con el paso de los siglos ha sobresalido por sus vínculos con varios miembros de la realeza: el primero fue Jaume I, los condes Dalmau V y su hijo Jofre III acompañaron al rey a la conquista de Mallorca. A partir de este momento se inicia la relación con la isla, relación que perdurará hasta la extinción de la casta, a finales del siglo XIX. Y, con el paso de los siglos, diferentes miembros de la estirpe han destacado por formar parte de diferentes estamentos nobiliarios, políticos o eclesiásticos.
Los Rocabertí llevaban, también, otros apellidos como Verí, Boixadors, Cotoner, Pacs/Pax de forma que, estaban emparentados con varias familias mallorquinas de alto rango.
Los últimos miembros de la estirpe fueron Don Tomás de Rocabertí, Don Antonio y Doña Juana Adelaida de Rocabertí casada con Ramon Despuig Fortuny, VIII conde de Montenegro, quien como sobrino del cardenal Despuig, fue heredero de Raixa. Al morir Juana Adelaida (en 1899), el último miembro de la estirpe, la propiedad pasó a Fernando Truyols, marqués de la Torre y a José Despuig González de Valbuena.
Finalmente, el año 1923, Peralada se desvincula definitivamente de los herederos de Mallorca al vender el conjunto monumental al industrial barcelonés Miquel Mateu. El archivo de la familia fue trasladado a Palma, anexionándose al archivo del marqués de la Torre; de manera que, a partir de entonces toda la documentación de los Rocabertí y de sus posesiones en Cataluña, se encuentra custodiada en Mallorca.
Hace pocos años, los descendientes ofrecieron el archivo al Govern Balear y, hoy por hoy, se puede consultar en el Arxiu del Regne de Mallorca, del que es director el sr. Ricard Urgell.
Por otra parte, en el Arxiu Municipal de Palma de Mallorca, del que es director el sr. Pere de Montaner, conde de Zavellà (uno de los títulos que ostentaban los Rocabertí), también se custodia documentación relacionada con los condes de Peralada, así como el archivo de Casa Vivot de Palma de Mallorca.
Desde la Biblioteca de Peralada hemos querido rendir homenaje a esta casta, reivindicar y recuperar los vínculos con la isla y dar a conocer la relación entre ambos territorios: Peralada y Mallorca//Mallorca y Peralada. Por ello, desde hace un par de años se está preparando la exposición “Los condes de Peralada y Mallorca”, que se inaugurará el próximo mes de junio, con la previsión de publicar un catálogo y realizar conferencias.
Como ya se ha dicho anteriormente, con esta exposición se pretende ver la relación de los condes de Peralada con Mallorca: los vínculos familiares, las posesiones y la incidencia de sus vivencias en la restauración del Castillo y el Convento del Carme, en Peralada.
Como hecho extraordinario, la exposición mostrará documentos de los condes de Peralada (familia Rocabertí), custodiados en el Arxiu del Regne de Mallorca (Palma), documentos particulares procedentes de Casa Vivot y valiosos libros y objetos personales preservados en la Biblioteca, en el Archivo y en el Museo del Castillo de Peralada, de esta familia extinguida a finales del siglo XIX.
De los importantes fondos de la Biblioteca de Peralada se ha seleccionado el material bibliográfico y documental y gracias a él se podrá ver la relación de los condes de Peralada con algunas de las posesiones más importantes de la isla como Raixa (Bunyolí), Bendinat (Calvià) o Can Puig a Palma. Las relaciones con importantes prohombres mallorquines como el cardenal Despuig y cronistas mallorquines como Joan Dameto, Vicente Mut, Joaquim M. Bover, Antonio Furió o Álvaro Campaner.
La exposición bibliográfica y documental se complementará con piezas del fondo museístico, con mobiliario y cuadros y retablos que pertenecieron a los condes de Peralada, de pintores mallorquines: Antoni Ribas/Ribes, Fausto Morell o el del círculo de Guillem Mesquida. Así mismo, se mostrarán retratos de la familia hechos por el mejor retratista del s. XIX, Vicente López.
Inés Padrosa Gorgot
Bibliotecaria